Diagnósticos tardíos a causa de la pandemia: caso cánceres ginecológicos 

| 8 / 9 / 21

El diagnóstico tardío de cánceres ginecológicos a causa de la pandemia se ha convertido en una preocupación para el cuerpo médico de la Clínica del Country.

Los cánceres de cuello uterino, ovario y endometrio, registraron el mayor número de casos nuevos en la población femenina colombiana durante el año 2020. Por síntomas inespecíficos o, incluso, por tratarse de tumores asintomáticos, el diagnóstico temprano es posible solo con controles rutinarios.


Experta de la Clínica del Country indica cuáles son los principales síntomas, tratamientos y población más vulnerable a estos tres tipos de cáncer.


Se denomina cáncer ginecológico a cualquier tipo de cáncer que se origina en los órganos reproductivos de la mujer. Cada uno presenta signos y síntomas específicos, así como factores de riesgo distintos. En Colombia, los tres cánceres de mayor incidencia son: el cáncer de cuello uterino, el de ovario y el de endometrio.


Según Globocan, durante el año 2020, se presentaron en el país más de 4.700 casos de cáncer de cuello uterino, más de 2.300 casos de cáncer de ovario  y más de 2600 casos de cáncer de endometrio.


Debido a que estas cifras muestran una clara tendencia de crecimiento, el cuerpo médico de la Clínica del Country, hace un llamado urgente a todas las mujeres para que asistan a sus controles de rutina, ya que esta es la única medida que permite la detección temprana de tumores. Solo así, se puede aplicar la estrategia ideal para mantener la salud e integridad de cada paciente. Hoy, especialmente, el cuerpo médico enfrenta un reto adicional, puesto que con la pandemia generada por el COVID – 19, los especialistas se encuentran día a día, con más casos de diagnósticos tardíos.  Muchas mujeres, dejaron de consultar a tiempo o no se realizaron los exámenes de rutina, a pesar de haber presentado alteraciones -como sangrados por varios meses-, debido a la aprehensión que generaba el miedo al contagio.


La Dra. Claudia Cruz, ginecóloga oncóloga de la Clínica del County, explica cuáles son los principales síntomas de alerta, chequeos de detección temprana, tratamientos y población más vulnerable a estos tres tipos de cáncer.


Cáncer de Cuello Uterino:


En estadios tempranos puede ser una enfermedad asintomática. A medida que va avanzando, aparece sangrado durante las relaciones sexuales, sangrado genital y/o dolor pélvico irradiado a la espalda o a la pierna. También se puede presentar disuria -dolor al orina-), hematuria -presencia de sangre en la orina- y sangrado rectal por compromiso de órganos vecinos. Si hay compromiso linfático, se puede presentar inflamación en las piernas.  Cuando este cáncer alcanza un estado aún más avanzado, se dan sangrados tan severos, que hacen que la paciente deba ir a urgencias, donde, por lo general, se hace necesaria una transfusión.


Para la detección temprana, basta con una citología y una prueba del Virus de Papiloma Humano (VPH).  En caso de resultados anormales, se realiza una colposcopia -examen para detectar lesiones precancerosas, o un cáncer ya instaurado-.


La población más sensible a este tipo de cáncer es: personas que inician relaciones sexuales o tienen embarazos a edad temprana, comparten varios compañeros sexuales, son fumadoras o presentan un diagnóstico previo del VPH. Sobre esto, la experta hace énfasis en que el cáncer de cuello uterino está ligado al VPH -especialmente a los subtipos 16 y 18, los cuales se asocian al 70% de este tipo de cáncer-.


Cáncer de Ovario:


Este tiene síntomas inespecíficos. Puede haber dolor pélvico o abdominal, urgencia urinaria, aumento del perímetro del abdomen o distensión abdominal. De igual manera, puede asociarse con sangrado vaginal o síntomas gastrointestinales inespecíficos.  Su aparición se da en cualquier etapa de la vida, pero se presenta generalmente entre los 45 y 50 años.

Una de las graves particularidades del cáncer de ovario es que su detección temprana no es fácil, ya que la ecografía transvaginal más el marcador tumoral no son tan específicos, por lo que diagnosticar este tipo de cáncer en estadios tempranos es más complejo. Por esto, se recomienda una visita al año con el ginecólogo, quien podrá dar un seguimiento a cualquier alteración relacionada con este órgano.


Cáncer de Endometrio:

Los principales síntomas son: sangrado genital anormal, en especial en paciente post menopáusicas.  En pacientes más jóvenes, se presenta con sangrado entre periodos, o muy fuertes y prolongados durante la menstruación. Para su diagnóstico se requiere una ecografía transvaginal y, si hay algún hallazgo a nivel endometrial, se debe tomar biopsia. Las pacientes que presentan mayor incidencia con este tipo de cáncer son: mujeres menopáusicas, obesas, diabéticas, hipertensas o aquellas que no han tenido hijos.

Finalmente, la Dra. Cruz afirma que para los tres casos se pueden tener tratamientos de acuerdo con el estadio en que se diagnostique. La cirugía, quimioterapia o radioterapia son los más comunes.  En esta etapa, es muy importante el manejo integral, que consiste en que el tratamiento vaya de la mano de un ginecólogo oncólogo, oncólogo clínico, radioterapeuta, y, en ciertos casos, también se recurre a la ayuda de otras especialidades como nutrición, cuidados paliativos, psicología o psiquiatría.